segundo semestre 2011



A inicios de este último semestre Rosalía y Cindy, ambas estudiantes de psicología, indignadas por la facilidad con la que los psicólogos autorizados hacen sus pesos aprobando los test de personas que solicitan permiso para portar armas, decidieron hacer de ello su tema de investigación. Compraron armas de juguete, demasiado similares a las que matan, y se fueron al centro de la ciudad a hacer test a diversas personas. Casi todas pasaron. Emocionadas, por haber pasado y recibir un arma, las personas aprobadas dispararon casi inmediatamente. La ciudad se llenó de francotiradores. De haber sido verdaderas las pistolas las plazas se hubieran quedado sin palomas y un par de gente hubiera perdido la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario